RIMADA LAROSA HÉCTOR ARIEL

Héctor fue trabajador de La Caja de Crédito Rosario y fue desaparecido durante la última dictadura militar al igual que su esposa Olga. Juntos tenían un bebé de 13 días.  

La Caja de Crédito Rosario fue absorbida en una primera instancia por el Banco Udecoop y posteriormente por el Banco Credicoop, como consecuencia de la Ley de Entidades Financieras dictada por Martinez de Hoz en el año ’77. Por esto que compañeros de esa entidad cooperativa recuerdan sus días en la Caja 

TESTIMONIOS DE COMPAÑERES DE TRABAJO DE HÉCTOR RIMADA. 

#TESTIMONIO DE JOSÉ ABUD, COMPAÑERO DE TRABAJO DE HÉCTOR EN CAJA DE CRÉDITO ROSARIO: 

Hoy 18 de marzo de 2021 a seis días de cumplirse los 45 años del día más aciago de la historia Argentina , el golpe cívico, militar y eclesiástico y a pedido de una ex-compañera de trabajo y lucha escribo esta breve nota

HECTOR RIMADA fue un excelente compañero de trabajo, trataba que la tarea asignada a cada compañero  se cumpliera con toda rigurosidad . Desgraciadamente después de tantos años no puedo recordar fehacientemente el diálogo mantenido con él en el horario de la merienda, si puedo recordar que la discusión era totalmente encendida.  

Un tiempo después de su desaparición su cuñada apareció con su bebé que no llegaría a tener un año, idéntico a Héctor, inclusive en el color de sus ojos. Lo único que espero y deseo es que en algún momento de cualquier día sepamos qué pasó con él (aunque lo imaginamos) y dar con sus restos y los de su esposa. 

Deseo que eso suceda y me apague aunque sea en lo más mínimo mi tristeza.  

Un ETERNO ABRAZO Héctor, estés donde estés.  

Con mucho amor este compañero y amigo que no te olvida.  José  Abud..!! 

#TESTIMONIO DE CLAUDIO ZANÓN, TRABAJADOR DE BANCO CREDICOOP, COMPAÑERO DE HÉCTOR EN LA CAJA DE CRÉDITO ROSARIO: 

Querida Chili, tu llamado me llevó a una época terrible y muy dura. Al pensar que podía decirte de nuestro compañero Rimada, de él recuerdo que era muy callado y muy serio pese a su juventud, si bien yo no compartí mucho tiempo con él en nuestra querida Caja de Créditos Rosario. Yo solo tenía 19 años cursaba el primer año en la Escuela Nacional de Títeres y vos sabés que uno se siente de alguna manera cómplice de esos hijos de puta.  Por qué no podías gritar o patalear de lo que estaban haciendo, yo me enteré lo de él cuando llegue a la Caja y habían detenido también a la profesora de plástica de la escuela, y a este y al otro, tiramos en los cimientos de la cocina de mis viejos, libros, dos póster del Che, discos, SUEÑOS, REBELDIAS, GANAS DE VIVIR EN UN MUNDO MAS JUSTO. Recuerdo fue un invierno muy crudo el del’ 76 la intendencia de entonces podó  todos los árboles y nuestros sueños. Ahora estoy en la tranquilidad de mi casa tomando unos amargos y le pido perdón al compañero Rimada, le arrebataban su vida y seguimos trabajando, no queríamos entender la magnitud de semejante acto. Estábamos podados como esos árboles, pasaron muchos años y llegó tu llamada de alguna manera sanadora, no importa que no recuerde mucho de él. Lo que importa es que aprendimos lo que significó la aberración cometida por esa gente y levantamos la bandera en honor de Héctor y de tantos más, los que podemos llamarnos sobrevivientes. 

#TESTIMONIO DE JUAN JOSÉ JOFRÉ, JUBILADO DE BANCO CREDICOOP, COMPAÑERO DE HÉCTOR EN LA CAJA DE CRÉDITO ROSARIO: 

Al compañero Rimada no lo conocí porque con el tiempo me enteré que yo entré en su lugar en diciembre de 1976. Por lo que supe a él y a la esposa los secuestraron y al hijo que era recién nacido se lo dejaron a su abuela . Eso es todo lo que puedo aportar y que en una marcha del 24 de marzo pude ver su foto entre los desaparecidos en la plaza San Martin. 

#TESTIMONIO DE ADRIANA RABINOVICH, JUBILADA DE BANCO CREDICOOP, COMPAÑERA DE HÉCTOR EN LA CAJA DE CRÉDITOS ROSARIO 

En Diciembre de 1975 comencé a trabajar en la Caja de Crédito Rosario, y allí conocí a Héctor Rimada, muy joven, como muchos de los que estábamos allí. Se desempeñaba en el sector de cajas, ocupaba la primera apenas se ingresaba, y era sólo para recibir depósitos .Yo estaba en otro sector , y fue casi 1 año el que pudimos compartir ese espacio. Lo recuerdo como alguien muy cálido, buen compañero, callado, discreto.  Integraba el equipo de football de la Caja de Créditos. Sabíamos que tenía militancia política, y que su compañera era delegada del gremio de sanidad. En Diciembre 1976 nació su hijo y tomó su licencia, pero en la fecha que debía reintegrarse no lo hizo.  Eran épocas de horror, desapariciones, detenciones  , Falcon verde, sirenas sonando a toda hora, y el miedo hacia que todo se hablara por lo bajo , pero empezó a  comentarse que Héctor estaba desaparecido. Al tiempo nos enteramos que un grupo parapolicial  lo había retirado por la fuerza de su casa junto a su esposa y que al bebe, que tenía  13 días, se lo habían dejado a una vecina, que luego supimos lo restituyó a la familia. 

Nunca más se supo de él, nunca más volvimos a verlo. , nunca lo olvidamos. Era un joven trabajador  que soñaba con un mundo mejor, que luchaba por dejarle una sociedad más justa a su hijo que acababa de nacer,   Por Héctor y los 30.000 desaparecidos, no olvidamos, ni perdonamos